El vino es vida.

Hoy quiero hablar de vino. Mágico néctar de felicidad. Me gusta el vino. Me gusta mucho el vino cuando es bueno, como el que ahora se está haciendo en toda España en general, y en León en particular. Creo que la producción de vino,  de gran arraigo en nuestra cultura románica,  es hoy en todo el mundo motor de desarrollo sostenible,  de innovación y progreso. Veo con admiración  que las zonas que han sabido desarrollar o crear sus denominaciones de origen, cuidando la calidad de sus vinos y aportando innovación y tecnología al tradicional cultivo de la vid, son también las que más calidad de vida  ofrecen a sus gentes en relación a las del entorno. Dicho de otra forma: el mapa de la calidad de vida, de la innovación, de la industria sostenible, del turismo cultural, del progreso, la riqueza y el bienestar es hoy en España,  en toda Europa y el mundo desarrollado, el mapa de las denominaciones de origen vinícolas. Vino, cultura, desarrollo y calidad de vida están íntimamente unidos. El vino es vida.

Por eso me gustó el  gesto de la Presidenta de la Diputación –como ves Isabel algunos aciertos tienes y sabemos reconocerlos- inaugurando el nuevo "Centro de Interpretación del Vino" en Valdevimbre. Apoyando con su presencia y económicamente, espero que en el futuro con algo más, el nacimiento de este centro en una zona que, después de tiempos de una cierta indefinición, está despertando con pujanza en los últimos años de la mano de restauradores y  bodegueros innovadores  y con la cobertura de la denominación de origen "Vinos tierras de León", que  cada vez está más asentada, produciendo unos estupendos caldos que son el deleite de los sentidos de todos los que nos atrevemos a pedir vino de aquí.

Y por eso mismo me parece peligrosísima e irresponsable la actitud acusatoria y obstruccionista del Alcalde de Camponaraya en relación a las Iniciativas del Consejo Regulador o a la Ruta del Vino del Bierzo que se está impulsando en la comarca.  Querido Antonio, creo sinceramente que te equivocas autoexcluyéndote de la ruta del vino, y que el torpedo que has lanzado a la línea de flotación de  esas iniciativas, si explota,  terminará perjudicando a tu municipio y al vino del Bierzo. Por eso espero que finalmente rectifiques. El vino y la industria bercianos te lo agradecerán.